lunes, 11 de abril de 2016

Día 6

Cuando las cosas se acaban, y tienes que empezar de 0 otra vez.
Cuando la persona que prometió quedarse a pesar de todo se va.
Cuando tu corazón ya no puedo soportar más el dolor.
Cuando sientes que todo dentro de ti se desmorona.

El dolor es inevitable, pero el sufrimiento es opcional, y no es la vida dándonos una segunda oportunidad, es la vida dándonos una lección.

Coincidimos en el momento perfecto, brindándonos exactamente lo que necesitamos en el momento indicado. Pero ciertamente en cierto punto ya habíamos cumplido nuestro cometido en la vida del otro.

El día de hoy puede doler, y escuchar tu nombre son como cuchillos directos a mi corazón.

Hiciste lo que pensé que no podrías hacer, soltaste mi corazón desde lo más alto, tan solo para verlo caer.

Y se que nos amamos, y cada segundo a tu lado valió la pena para aprender de cada error que cometimos, de cada piedra por la que caímos, no se si estas tan dolido y afectado como yo, no se de ti, y tal vez con el tiempo dejare de importarte tanto como tú me importas a mi, y sí, tal vez si me duela, porque se que no hay parte de mi que con él tiempo deje de acordarte de ti.

Pero espero poder sonreír con cada vez en la que te recuerde, y poder hablar de ti sin sentir esta presión en el pecho, espero que el tiempo cure las heridas.

Ya no quiero volver contigo, porque a pesar de que todo fue bonito, tuvimos errores, tanto tú como yo, errores que como me dijiste, yo jamás podre olvidar, por que yo no soy una persona que deje las cosas en el pasado, por que yo vivo pensando en el pasado, y conocerte hizo que notablemente dejara de pensar en ello.

Maduramos, tú y yo, mirar un año atrás y darme cuenta de que crecimos, y aprendimos, y que definitivamente hay que estar orgullosos de ello, pero maduramos de diferentes formas, y tal vez crecimos diferentes tallas, y tal vez es por ello que ya no encajábamos tan perfecto como lo hicimos al principio.

Es en las noches en las que te extraño, por que ahora pensar en el futuro me esta matando, porque aunque no quiera admitirlo, tú ya no estas en el, aunque así lo quiera.

Fui egoísta al pensar que lo podríamos solucionar, cuando la verdad era que yo solo te quería para mi, y es por ello que no te quería soltar.

Me aferre a ti, a los recuerdos, a los momentos, me aferre a la idea de que tú eras el único que yo quería, a los buenos momentos, que eran los que ahora me hacen llorar, me aferre a la idea de nuestro feliz futuro, de poder sobrevivir a nuestra relación tormentosa.

Hoy puedo decir que a pesar de solo ser seis días sin ti, para mi suena como un siglo, y el error que cometí fue hacerte prioridad, eras tú todo para mi, eras mi presente y mi futuro, y no dejar de hablar durante esos 370 días que vivimos al lado del otro, haciéndonos compañía, como si fuera lo único que teníamos, fue nuestro peor aliado. 

No puedo negar que mientras el tiempo fue pasando, nuestra conexión era increíble, y los recuerdos que construimos, los momentos que vivimos, las aventuras, los planes, las peleas, los silencios, los besos, todo lo que hubo entre nosotros, valió, y valió cada uno de sus segundos.

Definitivamente fuiste quien me enseño a tener paciencia, a valorar las cosas, a quererme, a luchar por mis sueños, y si no fuera por tu ayuda yo no estaría donde estoy ahorita, no dudo que querías lo mejor para mi, y no dudes de que yo quiero lo mejor para ti, aunque me duela ya no ser parte de ese mejor que construirás, y me duele el no ser yo quien este ahí para darte la mano cuando todos tus planes salgan tal y como los deseaste.

Fuiste y siempre seras esa etapa de mi vida, que me enseño, que me divirtió, que me quito lagrimas y sueño, que me dejo pensando toda una noche, y que me hizo reír hasta dolerme la panza, con tus ocurrencias, con tus manías, con tus errores, con mis errores, con mi desconfianza, con mi ansiedad, no dudo en decir que tú y yo, nos hicimos felices, tú y yo, fuimos felices.

Duró lo que tuvo que durar, y tal vez aún no se ha concluido, tal vez ya termino, y tal vez jamás sabrás que es lo último que tenia que decirte, o tal vez nos diremos todo cuando el momento llegue, y aunque ahora duela y arda en mi interior, aunque sienta que mi pecho se presione, y que mi corazón solo se estruje y se agriete, que se desangre y todo dentro de mi se desmorone, se que las cosas pasan por algo, y se que nuestra historia valió la pena, y no me voy a cansar de repetirlo, porque tú y yo, tú y yo fuimos reales.

Pero ahora tengo que aprender a amar a alguien más, a confiar en alguien más, a aprender a hacer todo lo que hice por ti, por alguien más, tengo que aprender a levantar a otra persona, y a cargar con su alma, y todo lo que este pasando, tengo que aprender a valorar a alguien que es más importante que cualquier otra persona, esa persona que tiene que ser mi razón de despertar y de dormir, y esa persona tengo que ser yo.

Te forcé a que seas lo que yo necesitaba, y nunca podré arrepentirme más por hacerte eso, por que no me daba cuenta de lo egoísta que estaba siendo.

Ahora solamente me queda seguir, a pesar de las heridas, y de que ahora tu vayas por un camino diferente al mío, ahora solamente me queda caminar de frente a pesar de las heridas, y de lo mucho que mi corazón pese, y mirar atrás solo para darme cuenta de que ya avance, de que sigo avanzando, y de que tendré que seguir adelante, y tendré que hacerlo sin ti.

Es solo el sexto día desde que paso, y aún derramo lagrimas al acordarme de ti, y aún te quiero en mi vida, y se que aún quisiera todo de nuevo contigo, pero tú no te volteaste a mirar atrás, y tal vez eso es lo mejor, te mantuviste firme, y ahora yo solo tengo que seguir, a pesar de lo débil que estoy, y seguiré avanzando, lento pero seguro, paso a paso, para poder ir más rápido cada día.

Quisiera pensar que volveremos, y que algún día todo volverá a ser como antes, que tú y yo volveremos a ser lo que eramos, que nuestros caminos se volverán a encontrar, que estamos destinados a ser, pero tengo que admitirlo, jamás volverá a ser lo que fue, y no volveremos, y nada será como yo lo imagine, por que gracias a ti aprendí que no todo va a salir de la manera que yo quiero, no todo se amolda a mi, y que en algunas ocasiones seré yo quien tenga que amoldarse, aunque no sea lo que quiera, y aunque me duela, me enseñaste de la manera más cruel, que la vida no es fácil, y que a veces no es bonita.

Seguiré escribiendo de ti, hasta que un día simplemente podré escribir sin sentir la presión sobre mi corazón, y ya no derrame ni una lagrima, y será solo alegría de que hayas sido parte de mi vida, de que hayas estado aquí cuando necesite de alguien, cuando sin buscarlo apareciste, cuando estuve preparada, a pesar de que hoy solo me hayas abandonado, y no es tu culpa, los dos necesitábamos de esto, pero ni uno era suficientemente fuerte para decirlo en voz alta.

Es solo el sexto día sin ti, y cada día te extraño un poco más. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario